San Diego (Notimex).- Un científico latino de la Universidad de California en San Diego (UCSD), Ricardo Domínguez, diseñó un navegador similar al que incluyen los autos modernos, para ayudar mediante teléfono celular a indocumentados a cruzar a salvo la frontera.
La llamada "Herramienta Transfronteriza para Inmigrantes" o "ITT", por sus siglas en inglés, "permite a los indocumentados precisar dónde encontrar agua en el desierto, iglesias refugio o grupos de derechos humanos", dijo Domínguez en entrevista telefónica con Notimex desde España, donde imparte clases este semestre.

"La herramienta es muy útil, por ejemplo, para ubicar grupos de caza-inmigrantes como los ?Minuteman?", comentó el científico del Instituto de Telecomunicaciones e Información Tecnológica de la UCSD.
El instituto ha diseñado hasta ahora la herramienta transfronteriza con un solo modelo de teléfono celular, el Motorola i455.
"Ya tenemos miles de teléfonos convertidos en herramientas transfronterizas y los pensamos entregar a organizaciones que rescatan a indocumentados y a grupos que defienden sus derechos", comentó.

Según algunos bazares de internet, ese modelo de teléfono cuesta entre 30 y 40 dólares; adquirido en subasta electrónica es bastante más barato. El costo de convertirlos en navegadores GPS (sistema posicional global, vía satelital) es mínimo, "si se sabe cómo", dijo.
"Lo que hicimos fue primero ?quebrar? el código electrónico de ese modelo de teléfono celular para integrarle un sistema sencillo de navegación", explicó.
"Luego le agregamos otra información, como dónde está el agua que dejan en el desierto Los Angeles de la Frontera, dónde están las iglesias cuáqueras (que ayudan a los inmigrantes con base en sus creencias cristianas), los grupos caza-inmigr antes y la Patrulla Fronteriza", explicó.
El científico, quien intenta "quebrar" o descifrar códigos de otros modelos de telefonía celular, comentó que no le preocupa que las autoridades estadunidenses detengan su proyecto.
El científico dijo que muchos indocumentados que han sido deportados a la frontera mexicana dejan en Estados Unidos a cónyuges e hijos estadunidenses que los necesitan.
Cruzar la frontera implica riesgos de muerte en los desiertos o ríos, de asalto o de volver a ser detenidos tras ser expulsados y entonces el inmigrante tiene que enfrentar potenciales juicios y sentencias de prisión.
Estudiantes del proyecto de Domínguez cruzan la frontera y regalan teléfonos celulares en la ciudad mexicana de Tijuana, cerca de la puerta por donde salen de California los deportados, sin preguntar si las personas que los reciben son inmigrantes o residentes locales.
Quienes usan los localizadores portátiles pueden utilizarlos para cruzar la frontera o llamar por teléfono a sus familiares, en México o en Estados Unidos, comentó.
Dijo que en los últimos 20 años ha realizado investigaciones científicas tecnológicas "y de desobediencia civil electrónica".
Domínguez, originario de El Paso, Texas, pero quien desde niño vive en California, se considera a sí mismo un "científico hacker --intruso cibernético-- y activista".
Comentó que espera una reacción no de parte de autoridades estadunidenses, sino de los grupos autodenominados "Minuteman". "Ellos saben perfectamente quiénes somos, en el laboratorio (de la UCSD) y lo que hacemos. Creo que van a ser muy críticos de este proyecto cuando se enteren".